A mis queridos hermanos de travesía existencial, les quiero desear de corazón un muy Feliz Año Nuevo 2022, se cierra un ciclo, un ciclo lleno de colores y sabores, tan diverso como lo es nuestra raza y nuestras experiencias de vida en este planeta. Abrazar un nuevo año de vida, donde al igual que otros años pasados, su carta de presentación es la incerteza, el misterio, la aventura, un nuevo plan de existencia que no es definible para saber qué pasará en cada uno de los días de este nuevo ciclo.
He ahí la magia y el desafío, y tal como el año que se nos va, tendrá momentos en que nos sentiremos plenos y felices, dueños del mundo, como habrá otros en que nos visitarán nuestros amigos el dolor, la tristeza, el desgano, la frustración, si no hemos aprendido a lidiar con estos estados del sentir, es la hora de aprender la lección, para que surja la aceptación, la plenitud, la calma interior que nos permita empatizar con esta experiencia tan misteriosa que es el arte del vivir.
Me inclino ante ti mi Señor, para pedir y agradecer que en este año 2022 que se aproxima, todas aquellas familias que hayan perdido un ser querido en algún instante, les des la fortaleza interna, espiritual, de volver a re-encantarse, que tengan la capacidad de renovar sus creencias, que puedan caminar con la fe que “más tarde que nunca” nos volveremos a encontrar con todos nuestros seres queridos que algún día partieron, para fundirnos con ellos en un gran abrazo, cálido, en que nuestros ojos se cierren frente a este magno acto y así poder dejar atrás y curar las heridas ocasionadas por las pérdidas de quienes amamos y extrañamos.
Maestro de maestros acompaña aquellas almas que están atravesando un mal momento, que se sienten solas, desposeídas de cariño, que quizás en estos instantes están dejando caer lágrimas en sus rostros para que sean tocadas por algún alma bondadosa, que los visite, que esté con ellos y puedan sentirse acompañados, amados, dignos y que la vida si vale la pena transitarla, que hay una luz al final del túnel, que la esperanza este siempre viva en sus corazones, ellos están llamados a ser los futuros maestros de quienes los sucedan en este planeta enseñándoles a como convivir con el dolor y superar finalmente los estados de soledad, de escasez de cariño, de la ruta del sin sentido.
Especies vivientes todas, desde el más pequeño ser vivo, muchos de quienes nos habitan y viven al interior de nuestro organismo, insectos, árboles, aves, vidas terrenales y marinas, seres humanos, planeta, universo, galaxias, que el año que se avecina sea bueno para todos nosotros, somos un ecosistema divino, donde la razón humana no alcanza para entenderlo y controlarlo, este es un espacio de vida donde todos nos necesitamos, donde no falta, ni sobra ninguno. Que la energía positiva del universo, que la luz de los seres buenos que andan por allí deambulando, el cariño, la solidaridad, el amor, la fe, la paz, la salud inunde y bañe las vidas y corazones de todo aquél que lo necesite, para que puedan ser felices, amar y ser amados como nuestro Creador nos ama, que mayor referente, su prueba de amor fue dar la vida por cada uno de nosotros, que este año 2022 podamos renunciar a nuestro ego insaciable, para poder hacer feliz a otro ser viviente que necesita de nuestra palabra, presencia y amor.
Feliz Nuevo Año, infinitas gracias por todo lo que hemos aprendido y por el amor recibido. Un abrazo fraternal, lo mejor de lo mejor para sus valiosas vidas y que a sus seres queridos les roben una sonrisa cada vez que tengan un acto de amor hacia ellos, a cerrar los pendientes, a ser tremendamente agradecidos y humildes para así poder escuchar otras experiencias de vidas, que nos permitan aprender y crecer, avanzar hacia ese hermoso estado que es la Sabiduría. Y que tengan y se hagan tiempo, pues es una medicina que escasea y que podría sanar tantas heridas, si nos detuviéramos aunque sea un breve instante. Un Abrazo.
Carlos Arismendi Gukowsky.
Farhum. Iluminando Vidas.